-
·
*Departamento de Postgrado e
Investigación, Escuela Superior de Medicina IPN (Instituto
Politécnico Nacional). México. D.F.
Sports Clinic, World Trade Center, Cd. De Mexico.
-
·
Pagina Electrónica:
www.benignozenteno.com
-
·
** Medico del Equipo de Fútbol
Americano “Águilas Blancas”, IPN.
-
·
*** Director de Medicina del
Deporte, Escuela superior de Medicina, IPN.
-
·
**** Director Equipos de Fútbol
Americano, IPN
-
·
***** Departamento de Postgrado
e Investigación, Escuela Superior de Medicina, IPN
Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte
- número 13 - marzo 2004 - ISSN: 1577-0354 RESUMEN
Se realizo un trabajo
prospectivo, de tipo cohorte, simple ciego, con el seguimiento de
jugadores titulares de fútbol americano, de un equipo de “liga
Mayor” en México. Formándose aleatoriamente 2 grupos, uno con
vendaje en tobillos previo a sus entrenamientos o juegos y otro sin
vendaje, este ultimo con ejercicios extra a los realizados en sus
entrenamientos en pies y tobillos. Se siguió a estos jugadores en
relación a la incidencia de lesiones de tobillo en una temporada.
Los resultados mostraron una tendencia a “lesionarse” sin el uso del
vendaje con cinta, sin ser estadísticamente significativa esta
diferencia (p=0.52). Y si se encontró diferencia importante en
cuanto a la posición dentro del campo de juego del deportista y el
numero de temporadas jugadas.
SUMMARY
A
prospective, single blind, cohort study was done. Following American
football players of a “Major League” team in Mexico. Two first
team groups were formed at random. One with taping of their ankles
before practice or games. And the second group without taping but
with extra exercises of the foot and ankle. The players were
followed for one season for the incidence of ankle sprains. The
results showed a tendency to have more lesions without tape, but the
difference was not statistically significant (p= 0.52). Important
difference was noted related to the position of the player in the
field and the number of seasons played.
Palabras clave: Fútbol
americano, vendaje con y sin cinta de tobillos, no diferencia
significativa.
Key words: American
football, with and without tape, no significant difference.
Introducción
El uso de "tape"
o vendaje con cinta es controversial (1,2,3,4,5,6,7,8,9,10,11,12).
La mayoría de los deportistas que realizan prácticas o competencias,
solicitan que sus tobillos sean "taipeados" o vendados con cinta,
para "prevenir" una lesión o hacer que no se presente una recidiva
de una ya sufrida. Sin embargo, el tiempo horas-hombre, más el
material utilizado es considerable en todos los equipos de fútbol
americano y su funcionalidad es dudosa (1,3,4,5,8,9,11,12) e,
inclusive, algunos reportes recientes demuestran el riesgo de
utilizar este tipo de "soportes externos preventivos" (4,6).
Considerando lo anterior se planteó la hipótesis de que el vendaje
con cinta adhesiva ( "tape") en los jugadores de fútbol americano, y
en general en los atletas, es útil únicamente durante los minutos
iniciales del juego o práctica, por lo que no cumple la función
ideal, como preventivo de lesiones en el sistema
músculo-esquelético, específicamente en tobillo. El objetivo del
estudio fue validar la hipótesis, para en un futuro, sugerir el
manejo preventivo de lesiones en tobillo, demostrando que no es
necesario, ni útil, ni costeable el vendaje con cinta o "taipeo" de
los tobillos de los jugadores de fútbol americano.
Material y Métodos
Se realizó un estudio
longitudinal, prospectivo de intervención deliberada y ciego único
con 22 atletas del mismo equipo, de " liga mayor", titulares o
denominados de "primer equipo" durante una temporada y que no
tuvieron lesiones previas en tobillo.
Aleatoriamente se formaron
2 grupos de atletas. Un grupo denominado T (11 de ellos) a los
cuales se les manejó con vendaje con cinta o conocido como "taipeo",
con la técnica tradicional, del mismo equipo, con el mismo "trainer"
o entrenador para aplicarla. Otro grupo denominado S (los otros 11)
sin vendaje, pero con énfasis en ejercicios de propiocepción,
pliométricos, excéntricos de tendón de Aquiles y fortalecimiento de
músculos peroneos. A este último grupo se le entregó una hoja de
ejercicios que realizarían extra a sus entrenamientos, así como
ejercicios que llevarían a cabo antes de cada entrenamiento y/o
juego, cambiando ésto por el "ritual" del taipeo, sabiéndolo los
deportistas en forma expresa.
Se definieron como
lesiones de tobillo, todas aquellas que se produjeran principalmente
por un mecanismo de inversión del pie y tobillo, con daño de los
ligamentos laterales del tobillo y cápsula, y lesión de ligamento
medial deltoideo, durante los juegos de temporada. Las lesiones se
clasificaron como: Grado I.- Dolor, que aumenta a la digito presión,
edema en tobillo, no equimosis, no edema de pie, no inestabilidad
ventral con la maniobra de cajón, ni en varo de tobillo en neutro y
con planto flexión de 25 grados. Grado II: edema muy importante a
tensión, dolor incapacitante muy importante, equimosis medial y/o
lateral y no inestabilidad detectable a la exploración. Grado III:
Presencia de inestabilidad franca y/o luxación o subluxacion de las
articulaciones del tobillo. Así también se consideraron las
fracturas concomitantes de pie (5º metatarsiano, fractura, luxación
de tobillo), con el antedicho tipo de mecanismo.
La temporada tuvo una
duración de 2 meses, del 6 de septiembre al 1º de noviembre,
efectuándose 9 juegos. Siete de los juegos se llevaron a cabo en
superficie de "pasto natural" y 2 en superficie denominada
"artificial".
La evaluación clínica se
llevó a cabo al final de la temporada de manera ciega por un
evaluador externo y con amplia experiencia en el área. La medida de
desenlace fue la presencia o ausencia de lesión (1=SI, 2 = NO) y se
consignaron las variables de edad en años, la posición del jugador
en el campo (que se colapsó en una escala nominal con tres niveles
de clasificación: FB (fullback o corredor); TO (Tackle o bloqueador
externo ofensivo) y otras), el número de la temporada que cursaba el
jugador, misma que se colapsó en dos niveles: el primer nivel los
que cursaban su 1ª-2ª temporada y el segundo nivel los que cursaban
su 3ª temporada o más. Los datos se incluyeron en el programa SPSS
ver 10.0 para Windows y se analizaron aplicando t de Student para
comparar los promedios de edad de los jugadores de ambos grupos (T y
S); el estadístico exacto de Fisher se aplicó para contrastar la
hipótesis nula de que la proporción de jugadores lesionados sería
igual entre los tratados con Tape (T) y los no tratados (S).
Paralelamente se realizó un análisis de riesgo relativo con
intervalos de confianza del 95 % y para evaluar las variables
confusoras se utilizó el estadístico de Mantel-Haenszel para
análisis estratificados. Para todos los contrastes estadísticos se
estableció como nivel crítico de significancia una p < 0.05.
RESULTADOS
La media de edad del
grupo S fue de 23.9 + 2.1 años y de 22.6 + 1.6 las del
grupo T (t de Student 1.55, p = 0.13, es decir que los promedios son
estadísticamente iguales y los grupos son comparables por la edad)
Dentro del grupo T,
tres jugadores dejaron el equipo por lesiones no relacionadas con el
tobillo. Uno no se presentó a entrenamientos o juegos después de la
sexta jornada. El segundo dejó de jugar después de la 7ª jornada por
un esguince cervical. El tercer jugador tuvo una luxación
glenohumeral por lo que abandonó el juego en la 9ª Jornada. Respecto
al grupo S, un jugador dejó de jugar por presentar una fractura de
peroné por golpe directo en la 5ª jornada.
Respecto a la posición de
los jugadores sobresale: la proporción de FB está más recargada
hacia el grupo T y, por el contrario todos los TO están en el grupo
S, tal como se observa en la tabla 1 (Chi cuadrada 6.6. p = 0.035,
es decir que, por las posiciones, los grupos no están balanceados o
bien quiere decir que son grupos con características diferentes en
cuanto a la proporción de jugadores según la posición que ocupan en
el campo de juego, especialmente en las posiciones FB y TO).
Tabla 1.
Distribución de jugadores
Según posición en el
juego
|
|
Grupo |
|
Total
|
|
|
|
|
|
|
S |
T |
|
|
Posición |
|
|
|
|
FB |
1 |
3 |
4
|
|
|
|
|
|
|
TO |
5 |
|
5
|
|
|
|
|
|
|
Otras |
5 |
8 |
13
|
|
Total |
|
|
|
|
|
11 |
11 |
22
|
|
Hay también una tendencia
similar a la anterior respecto a la distribución de los jugadores
según temporada de juego. En la tabla 2 se han colapsado las
distribuciones en dos estratos, uno corresponde a los que
participaron en la 1ª-2ª temporada y otro a los de la 3ª o más.
Véase en la tabla 2 que en el grupo S hay una mayor proporción de
jugadores que han participado en 3ª temporada o más; en cambio, en
el grupo T la proporción de los que ha participado en la 1ª-2ª
temporada es ligeramente mayor (estadístico exacto de Fisher p =
0.09, ello quiere decir que la distribución tiende a tener una
diferencia estadísticamente significativa).
Tabla 2. Distribución
de jugadores
según temporadas de juego
|
|
Grupo |
|
Total
|
|
|
|
|
|
|
S |
T |
|
|
Temporada |
|
|
|
|
1a-2a |
2 |
6 |
8
|
|
|
|
|
|
|
>3a |
9 |
5 |
14
|
|
Total |
|
|
|
|
|
11 |
11 |
22
|
|
En la tabla 3 se anota
la frecuencia de casos lesionados por grupo de tratamiento. En los
no tratados con Tape hubo 3 lesionados contra sólo 1 de los
tratados, este último de grado I y ocurrió en superficie de "pasto
natural". En el grupo sin tape (S), hubo 3 esguinces: dos grado I, y
un jugador con esguince grado II de nuestra clasificación. Dos de
los esguinces se presentaron en superficie "natural" y uno en
"pasto sintético".
Es decir que de los 11 del
grupo S el 27.2 % se lesionaron y de los 11 del grupo T sólo el 9.0
% sufrieron una lesión (Estadístico exacto de Fisher p = 0.29).
Tabla 3.
Distribución de jugadores lesionados según
tratamiento
|
|
Lesión |
|
Total
|
|
|
|
|
|
|
SI |
NO |
|
|
Grupo |
|
|
|
|
S |
3 |
8 |
11
|
|
|
|
|
|
|
T |
1 |
10 |
11
|
|
Total |
|
|
|
|
|
4 |
18 |
22
|
|
Según la prueba de Fisher
la diferente proporción de lesionados de uno u otro grupo no es
estadísticamente significativa; sin embargo, el riesgo relativo es
de 27.2 % / 9.0 % = 3.0, es decir que el grupo no expuesto al
tratamiento tiene 3 veces más probabilidad de sufrir una lesión al
compararlo con el grupo con el tratamiento T. El Intervalo de
confianza del 95 %, para el nivel del riesgo relativo, es de 0.36
hasta 24.5 veces más probabilidad de lesión si los jugadores no se
tratan con (T).
Pero como se ha visto al
inicio, hay un sesgo importante en el estudio porque estrictamente
los grupos de jugadores no son correctamente comparables ya que el S
tiene más jugadores en posición TO y el grupo T un poco más de
jugadores en posición FB. El análisis estratificado de la tabla 4
indica que los 3 lesionados del grupo S pertenecían a la posición TO,
mientras que el único lesionado del grupo T tenía la posición FB.
Tabla 4.
Distribución de jugadores lesionados según posición en el juego
|
|
|
Grupo |
|
Total
|
Posición |
|
|
|
|
|
|
|
S |
T |
|
|
FB |
|
|
|
|
|
Lesión |
SI |
|
1 |
1
|
|
|
|
|
|
|
|
|
NO |
1 |
2 |
3
|
|
|
|
|
|
|
|
Total |
|
1 |
3 |
4
|
|
TO/otras |
|
|
|
|
|
Lesión |
SI |
3 |
|
3
|
|
|
|
|
|
|
|
|
NO |
7 |
8 |
15
|
|
|
|
|
|
|
|
Total |
|
10 |
8 |
18
|
|
Para el estrato de
jugadores en posición FB la proporción de lesionados y no lesionados
según tipo de tratamiento (T o S) el estadístico exacto de Fisher
arroja una p = 0.75, es decir que no hay diferencias
estadísticamente significativas entre la proporción de lesiones de
los grupos T o S cuando los jugadores ocupan la posición FB; sin
embargo, el riesgo relativo para la cohorte del grupo T es de 1.5
más probabilidad de lesión que el grupo S*.
Por otro lado, en el
estrato de jugadores en posición TO/otras la proporción de
lesionados y no lesionados según tratamiento T o S el estadístico de
Fisher indica una p = 0.14, es decir que tiende ha existir una
diferencia significativa en el sentido de que los jugadores en
posición TO se lesionan más si son tratados con sin Tape que con
Tape y, de hecho, el riesgo relativo es de 2.1 veces más
probabilidad de lesión en los no tratados con T.
No obstante lo anterior,
el análisis estratificado con el estadístico de Mantel- Haenszel
reporta una p = 0.52, esto es que estrictamente el nivel de riesgo
de lesión entre los grupos T o S no es significativamente diferente
lo cual apoya el análisis de que el riesgo de lesión depende más de
la posición del jugador y no del tratamiento con T o S.
Finalmente, en la tabla 5
se analiza la relación entre lesiones por grupo de tratamiento pero
de acuerdo a la temporada de participación de los jugadores. Véase
en esta última tabla que de los 3 lesionado del grupo S uno estaba
en el subgrupo de 1ª-2ª temporada y 2 en el subgrupo de 3ª>
temporada y que el único lesionado del grupo T estaba en el subgrupo
de 1ª-2ª temporada.
Tabla 5.
Distribución de jugadores lesionados según temporadas de juego
|
|
|
Grupo |
|
Total
|
Temporada |
|
|
|
|
|
|
|
S |
T |
|
|
1a-2a |
|
|
|
|
|
Lesión |
SI |
1 |
1 |
2
|
|
|
|
|
|
|
|
|
NO |
1 |
5 |
6
|
|
|
|
|
|
|
|
Total |
|
2 |
6 |
8
|
|
>3a |
|
|
|
|
|
Lesión |
SI |
2 |
|
2
|
|
|
|
|
|
|
|
|
NO |
7 |
5 |
12
|
|
|
|
|
|
|
|
Total |
|
9 |
5 |
14
|
|
En el estrato de
jugadores que estaban en su 1ª-2ª temporada el estadístico exacto de
Fisher reporta una p = 0.46, es decir que la probabilidad de lesión
por grupo T o S es igual, pero el riesgo relativo de lesión del
grupo S es 3 veces mayor que los del grupo T, ello si los jugadores
están participando en su 1ª-2ª temporada.
Para el estrato de los que
estaban en su 3ª temporada o más el estadístico de Fisher indica una
p = 0.39, o sea que la probabilidad de lesión con T o con S también
es igual, pero en este caso el riesgo relativo de lesión para los S
es apenas 1.7 veces mayor que para los de T.
La prueba de Mantel-Haenszel
reporta una p = 0.40, es decir que nuevamente el riesgo de lesión no
depende tanto de T o S; sin embargo, se revela una tendencia a que
los jugadores sufran más lesión al ser tratados con S que con T
cuando están en su 1ª-2ª temporada.
DISCUSIÓN.
Desafortunadamente, la
aleatorización de los jugadores a los grupos formados no tuvo el
efecto deseable de homogeneizarlos a fin de hacerlos comparables
desde el estadio inicial.
La posición de los
jugadores y la temporada que estaban cursando sesgó el estudio de
manera importante y deja la impresión de que sólo existe una
tendencia hacia mayor riesgo de lesiones de tobillo en los casos en
los que no se usa el vendaje con la cinta Tape. Por otra parte, los
intervalos de confianza del nivel de riesgo de lesión son muy
amplios por el pequeño tamaño de las muestras lo que seguramente
está causando un error tipo II por la baja potencia estadística del
diseño.
En resumen, no hay
evidencia que apoye la hipótesis de que los jugadores de futbol
americano tiendan a lesionarse más al ser tratados con Tape que sin
Tape; en cambio se aprecia que la tendencia a las lesiones se deben
a la posición (especialmente TO y FB) y la temporada que cursan
(especialmente 1ª-2ª). Puede ser probable que algunos estudios que
han documentado la dudosa utilidad del vendaje
(1,2,3,4,5,6,7,8,9,10,11,12) o inclusive que sea perjudicial (4,6)
tengan diseños metodológicos defectuosos para lo cual una buena
alternativa sería efectuar un meta-análisis en el futuro.
REFERENCIAS
-
Barkouikis V,
Sykaras E, Costa F et al: Effectiveness of taping and bracing in
balance Percept Mot Skills 2002 Apr; 94 (2): 566- 74
-
Bragg RW, Macmahon
JM, Overom EK, et al: Failure and fatigue characteristics of
adhesive athletic tape Med Sci Sports Exerc 2002 Mar; 34
(3):403-10
-
Kerkhoffs GM;
Struijs PA, Marti RK et al: Functional treatments for acute
ruptures of the lateral ankle ligament: a systematic review Acta
Orthop Scand 2003 Feb;74 (1):69-77
-
Mc Kean LC, Bell G,
Burnham RS: Prophylactic ankle bracing vs. Taping: effects on
functional performance in female basketball players J Orthop
Sports Phys Ther 1995 Aug; 22 (2):77-81
-
Nishikawa T,
Kurosaka M, Yoshiya S, et al: Effects of prophylatic ankl;e
support on pronation during gait Int Orthop 2002; 26 (6):381-5
-
Nyland Ja, Ullery LR,
Cabor DN: Medial patellar taping changes the peak plantar force
location and timing of female basketball players Gait Posture 2002
Apr; 15(2):146-52
-
Parkkari J, Kujala
UM, Kannus P : Is it possible to prevent sports injuries? Review
of controlled clinical trials and recommendations for future work
Sports Med 2001; 31(14):985-95
-
Refshauge KM;
Killbreath SL; Raymond J : The effect of recurrent ankle
inversion sprain and taping on propioception of the ankle Med Sci
Sports Exerc 2000 Jan;32(1):10-5
-
Riemann BL; Schmitz
RJ; Gale M et al: Effect of ankle taping And bracing on vertical
ground reaction forces during drop landings before and after
treadmill jogging J Orthop Sports Phys Ther 2002 Dec;32(12):628-35
-
Robbins S, Waked E,
Rappel R : Ankle taping improves propioception before and after
exercise in young men Br J Sports Med 1995 Dec; 29 (4):242-7
-
Verhagen EA, van
Mechelen W, de Vente W: The effect of preventive measures on the
incidence of ankle sprains Clin J Sports Med 2000 Oct;10(4):291-6
-
Verhagen EA, van der
Beek, van Mechelen W: The effec of tape. Braces, shoes on ankle
range of motion Sports Med 2001;31(9):667-77
|